Así como la estrecha virtud de la mente estrecha Anida en la cumbre, Sobrevivo yo, en las trincheras, Agolpando sacos de ideas Que amortigüen los disparos de la ignorancia. …Y recorro la espiral inversa, llegar a lo no creado, Y poder inventar ahí, lo no inventado…
Siempre inventar, siempre crear para no morir de apatía.
ResponderEliminarUn saludo